matambre al horno dorado y jugoso 1

La Mejor Receta de Matambre al Horno sin Tiernizar para Sorprender

Si eres amante de la gastronomía y te encanta probar nuevos sabores, seguramente has escuchado hablar del matambre. Este corte de carne es muy popular en la cocina latinoamericana, especialmente en Argentina y Uruguay, y es apreciado por su sabor único y su versatilidad culinaria. En este artículo, te enseñaremos la mejor receta de matambre al horno sin tiernizar para que puedas sorprender a tus invitados con un plato delicioso y lleno de sabor.

¿Qué es el matambre y por qué es tan popular?

El matambre es un corte de carne que se obtiene de la parte ventral del animal, entre la costilla y el cuero. Su nombre proviene del término en español «matar hambre», ya que tradicionalmente se utilizaba como un alimento para saciar el apetito. Sin embargo, con el paso del tiempo, el matambre se ha convertido en uno de los cortes de carne más populares y apreciados en la gastronomía.

El matambre se caracteriza por ser una carne magra y tierna, con una capa de grasa en la parte externa que le da un sabor especial. Su textura suave y su sabor intenso lo convierten en una opción perfecta para marinar y cocinar al horno, ya que absorbe muy bien los sabores de los condimentos y se mantiene jugoso durante la cocción.

El matambre y su origen

El origen del matambre se remonta a la época de la colonización española en América Latina. Los colonizadores trajeron consigo sus técnicas de preparación de carne, y fue así como surgieron diferentes cortes y formas de cocinar la carne en la región.

En el caso del matambre, se cree que su origen se encuentra en la técnica de «asado a la cruz» utilizada por los gauchos argentinos. En esta técnica, se cocinaba la carne a fuego lento y se utilizaban diferentes cortes, entre ellos el matambre, que se colgaban en una cruz de madera para asarlos.

A lo largo de los años, el matambre se ha convertido en un plato emblemático de la cocina argentina y uruguaya, y se ha popularizado en otros países de América Latina y el mundo.

Por qué el matambre es tan apreciado en la gastronomía

El matambre es apreciado en la gastronomía por varias razones. En primer lugar, su sabor único lo hace ideal para ser utilizado como base de diferentes recetas. Su textura suave y jugosa lo convierten en una opción perfecta para marinar y cocinar al horno, ya que absorbe muy bien los sabores de los condimentos.

Otra razón por la que el matambre es tan apreciado es su versatilidad culinaria. Se puede preparar de diferentes formas, desde asado al horno hasta relleno con verduras y queso. Además, se puede servir como plato principal o como parte de una tabla de fiambres o asado.

Por último, el matambre se destaca por ser una carne magra y nutritiva. Es rico en proteínas, vitaminas del complejo B y minerales como el hierro y el zinc. Además, al ser un corte de carne delgado, es una opción más saludable en comparación con otros cortes más grasos.

Ingredientes necesarios para la receta

Antes de comenzar a preparar el matambre al horno, es importante asegurarse de tener todos los ingredientes necesarios a mano. A continuación, te presentamos una lista de los ingredientes principales que necesitarás, así como algunas opciones opcionales para personalizar tu matambre.

Lista de ingredientes principales:

  • 1 matambre de vaca
  • 2 dientes de ajo
  • Jugo de 2 limones
  • Sal y pimienta al gusto
  • Aceite de oliva
  • 1 cebolla grande
  • 1 zanahoria
  • 1 pimiento rojo
  • 1 pimiento verde
  • 1 hoja de laurel

Ingredientes opcionales para personalizar tu matambre:

  • Queso provolone
  • Tomates secos
  • Espinacas
  • Aceitunas
  • Huevos duros

Estos ingredientes son solo una sugerencia, puedes agregar o quitar ingredientes según tus preferencias y disponibilidad. El matambre es un plato muy versátil y puedes personalizarlo de acuerdo a tus gustos.

Preparación paso a paso

Una vez que tengas todos los ingredientes listos, es hora de comenzar a preparar el matambre al horno. A continuación, te presentamos una guía paso a paso para que puedas seguir fácilmente el proceso de preparación.

Paso 1: Preparación de la marinada

Lo primero que debes hacer es preparar la marinada para el matambre. En un bol, mezcla el jugo de limón, el ajo picado, sal, pimienta y un chorrito de aceite de oliva. Remueve bien todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea.

Coloca el matambre en un recipiente y vierte la marinada sobre la carne. Asegúrate de cubrir bien ambos lados del matambre con la marinada. Puedes utilizar tus manos o un pincel de cocina para asegurarte de que la marinada se distribuya de manera uniforme.

Cubre el recipiente con papel film o una tapa y deja reposar en el refrigerador durante al menos 4 horas, o mejor aún, durante toda la noche. El tiempo de marinado es importante para que la carne absorba los sabores de la marinada y se vuelva más tierna.

Paso 2: Limpieza y condimentación del matambre

Una vez que hayas marinado el matambre, retíralo del refrigerador y déjalo reposar a temperatura ambiente mientras preparas los vegetales.

Pela y corta la cebolla en juliana, la zanahoria en rodajas y los pimientos en tiras. Puedes cortar los vegetales del tamaño que prefieras, pero asegúrate de que sean lo suficientemente grandes para que no se deshagan durante la cocción.

Retira el matambre de la marinada y reserva el líquido sobrante. Coloca el matambre sobre una tabla de cortar y condiméntalo con sal y pimienta al gusto. Puedes utilizar tus manos o un poco de aceite de oliva para ayudar a que los condimentos se adhieran a la carne.

En el centro del matambre, coloca una capa de vegetales cortados. Puedes utilizar solo cebolla y zanahoria, o agregar pimientos y otros vegetales de tu elección. Si lo deseas, puedes añadir también queso provolone, tomates secos, espinacas, aceitunas o huevos duros para agregar más sabor y textura al matambre.

Paso 3: Envolver el matambre y dejarlo reposar

Una vez que hayas añadido los vegetales y los ingredientes adicionales, es hora de envolver el matambre. Comienza enrollando uno de los extremos del matambre sobre sí mismo, asegurándote de que los rellenos queden dentro del rollo. Continúa enrollando el matambre hasta llegar al otro extremo.

Una vez que hayas enrollado el matambre, asegúralo con hilo de cocina o con palillos para que mantenga su forma durante la cocción. Esto es especialmente importante si has añadido ingredientes adicionales en el interior del matambre.

Coloca el matambre en una bandeja para horno y vierte el líquido de la marinada reservado sobre la carne. También puedes añadir un poco de aceite de oliva adicional si lo deseas.

Cubre la bandeja con papel de aluminio y deja reposar el matambre durante 30 minutos a temperatura ambiente. Esto permitirá que los sabores se mezclen y que la carne alcance la temperatura ambiente antes de cocinarla.

Paso 4: Cocción del matambre al horno

Una vez que el matambre haya reposado, es hora de cocinarlo al horno. Precalienta el horno a 180°C (350°F) y coloca la bandeja con el matambre en el centro del horno.

Cocina el matambre durante aproximadamente 2 horas, o hasta que esté tierno y dorado. Durante la cocción, puedes abrir el horno cada 30 minutos para regar la carne con los jugos de la bandeja. Esto ayudará a mantener la jugosidad del matambre y a realzar su sabor.

Si deseas que el matambre tenga una capa crujiente en la parte superior, puedes retirar el papel de aluminio durante los últimos 15 minutos de cocción.

Paso 5: Reposo y corte del matambre

Una vez que el matambre esté cocido, retíralo del horno y déjalo reposar durante al menos 10 minutos antes de cortarlo. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan dentro de la carne y que el matambre sea más fácil de cortar.

Para cortar el matambre, retira el hilo de cocina o los palillos y colócalo sobre una tabla de cortar. Utiliza un cuchillo afilado para hacer cortes diagonales en rodajas finas. Asegúrate de cortar contra la fibra de la carne para obtener rodajas más tiernas.

Sirve el matambre caliente y acompáñalo con tus guarniciones favoritas, como papas al horno, ensalada o pan casero. ¡Disfruta de este delicioso plato de carne, sabroso y lleno de sabor!

Consejos y trucos para lograr el mejor matambre al horno

Preparar un matambre al horno delicioso y jugoso requiere atención a los detalles y seguir algunos consejos prácticos. Aquí te presentamos algunos consejos y trucos para lograr el mejor matambre al horno:

Elección del corte de carne adecuado

Para obtener un matambre tierno y jugoso, es importante elegir el corte de carne adecuado. El matambre de vaca es el más comúnmente utilizado, pero también puedes optar por matambre de cerdo o de pollo, según tus preferencias.

Asegúrate de que el corte de carne esté fresco y de buena calidad. Si es posible, compra el matambre en una carnicería de confianza para asegurarte de que sea de origen confiable y de buena calidad.

Tiempo de marinado ideal

El tiempo de marinado es esencial para que la carne absorba los sabores de los condimentos y se vuelva más tierna. Se recomienda marinar el matambre durante al menos 4 horas, o idealmente durante toda la noche, para obtener los mejores resultados.

Si no tienes mucho tiempo para marinar el matambre, puedes acelerar el proceso utilizando un ablandador de carne o una mezcla de jugo de piña y papaya, que contienen enzimas naturales que ayudan a ablandar la carne.

Temperatura y tiempo de cocción recomendados

La temperatura y el tiempo de cocción son fundamentales para lograr un matambre al horno perfectamente cocido. Se recomienda cocinar el matambre a una temperatura media de 180°C (350°F) durante aproximadamente 2 horas, o hasta que esté tierno y dorado.

Si prefieres un matambre más jugoso, puedes reducir ligeramente el tiempo de cocción. Por otro lado, si prefieres un matambre más crujiente, puedes aumentar la temperatura del horno durante los últimos minutos de cocción.

Recuerda que cada horno es diferente, por lo que es importante estar atento y verificar la cocción del matambre regularmente para evitar que se seque o se queme.

Opciones de acompañamiento y presentación

El matambre al horno es un plato muy versátil que se puede servir con una variedad de acompañamientos y salsas. Algunas opciones populares incluyen papas al horno, ensaladas frescas, verduras asadas o arroz con vegetales.

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