Recetas auténticas y deliciosas de ojo de bife a la parrilla argentino: ¡sorprende a todos!
Bienvenido/a a este artículo donde te enseñaremos cómo preparar el ojo de bife a la parrilla, una deliciosa y famosa especialidad argentina. Si eres amante de la carne y quieres sorprender a tus invitados con un plato exquisito, sigue leyendo para descubrir todos los secretos y consejos para lograr un ojo de bife jugoso y lleno de sabor.
¿Qué es el ojo de bife?
El ojo de bife es un corte de carne vacuna muy apreciado por su sabor y textura. Se obtiene de la parte más tierna y jugosa del lomo, ubicada junto a la columna vertebral del animal. Su nombre proviene de la forma redonda y ovalada que tiene, similar a un ojo.
¿Por qué el ojo de bife argentino es tan famoso?
El ojo de bife argentino es reconocido a nivel mundial por su calidad y sabor incomparables. La cría de ganado vacuno en Argentina es una tradición arraigada en la cultura del país, lo que ha llevado a la producción de carnes de alta calidad. Además, la dieta natural de pasto y la crianza extensiva contribuyen a la terneza y jugosidad de la carne.
El ojo de bife argentino se destaca por su marmoleo, es decir, la cantidad de grasa intramuscular que se encuentra distribuida en forma de vetas en la carne. Esto le proporciona un sabor único y una jugosidad excepcional al cocinarlo.
La forma más tradicional de cocinar el ojo de bife argentino es a la parrilla, donde se logra resaltar su sabor y textura de manera óptima. A continuación, te explicaremos paso a paso cómo prepararlo de esta manera.
Paso a paso: Cómo preparar el ojo de bife a la parrilla
¿Qué cortes de ojo de bife se pueden utilizar?
El ojo de bife se puede encontrar en diferentes cortes, como el ojo de bife sin hueso (también conocido como rib eye steak), el ojo de bife con hueso (t-bone steak) y el ojo de bife angosto (porterhouse steak). Todos ellos son opciones excelentes para preparar a la parrilla, aunque cada uno tiene características ligeramente diferentes.
- Ojo de bife sin hueso (rib eye steak): este corte se caracteriza por su marmoleo uniforme y su gran cantidad de grasa intramuscular, lo que lo hace muy jugoso y sabroso. Es una opción perfecta si buscas un sabor intenso y una textura suave.
- Ojo de bife con hueso (t-bone steak): este corte combina el ojo de bife con un hueso en forma de «T», que contiene un trozo de solomillo en un extremo y el ojo de bife en el otro. Es una opción muy popular debido a la combinación de sabores y texturas que ofrece.
- Ojo de bife angosto (porterhouse steak): similar al t-bone steak, pero con una proporción mayor de solomillo en relación al ojo de bife. Esto lo convierte en una opción ideal si prefieres un corte más magro y tierno.
Independientemente del corte que elijas, asegúrate de que la carne sea de buena calidad y de origen confiable.
Marinado: ¿es necesario?
El ojo de bife argentino es tan sabroso por sí solo que no es necesario marinarlo para mejorar su sabor. Sin embargo, si deseas agregarle un toque adicional, puedes marinarlo durante unas horas antes de cocinarlo.
Un marinado clásico para el ojo de bife a la parrilla consiste en mezclar aceite de oliva, ajo picado, perejil, sal, pimienta y jugo de limón. Puedes agregar también hierbas y especias de tu elección, como romero, tomillo o pimentón. Coloca la carne en un recipiente hermético y déjala marinar en la nevera durante al menos 2 horas, volteándola ocasionalmente para que se impregne bien.
Sin embargo, ten en cuenta que el marinado puede afectar ligeramente la textura de la carne, ya que puede ablandarla demasiado si se deja por mucho tiempo. Por lo tanto, si buscas una textura más firme y jugosa, es mejor evitar el marinado o limitarlo a un máximo de 2-3 horas.
Preparación de la parrilla
Antes de encender la parrilla, es importante prepararla adecuadamente para asegurarte de obtener un calor uniforme y una cocción perfecta.
Si utilizas una parrilla de carbón, comienza encendiendo el carbón y espera a que se queme hasta que esté cubierto de una fina capa de ceniza blanca. Luego, distribuye el carbón en una sola capa en el fondo de la parrilla y coloca la parrilla a unos 15-20 cm de distancia para obtener un calor medio.
Si prefieres una parrilla a gas, enciende los quemadores y precalienta la parrilla a una temperatura media-alta, alrededor de 200-220°C.
En ambos casos, es importante limpiar bien la parrilla antes de cocinar el ojo de bife. Utiliza un cepillo de alambre para quitar cualquier residuo de comida y grasa, y luego engrasa ligeramente la parrilla con aceite para evitar que la carne se pegue.
Tiempos y temperaturas de cocción
Para obtener un ojo de bife a la parrilla jugoso y en su punto de cocción ideal, es importante controlar la temperatura y los tiempos de cocción.
La temperatura de cocción recomendada para el ojo de bife a la parrilla es de alrededor de 180-200°C. Esto permitirá que la carne se cocine de manera uniforme y conserve su jugosidad.
El tiempo de cocción puede variar dependiendo del grosor de la carne y del punto de cocción deseado. Aquí tienes una guía aproximada de los tiempos de cocción para un ojo de bife de 2-3 cm de grosor:
- Poco hecho: 2-3 minutos por lado
- En su punto: 4-5 minutos por lado
- Hecho: 6-7 minutos por lado
- Muy hecho: 8-9 minutos por lado
Recuerda que estos tiempos son solo una guía y pueden variar según tu preferencia personal y el grosor de la carne. Siempre es mejor utilizar un termómetro de cocina para asegurarte de que la carne esté cocida a la temperatura interna deseada. Para un ojo de bife jugoso, la temperatura interna recomendada es de aproximadamente 55-60°C para poco hecho, 60-65°C para en su punto y 70°C o más para bien hecho.
Técnicas de sellado y volteo
Para lograr un ojo de bife a la parrilla con una costra dorada y sabrosa, es importante utilizar técnicas de sellado adecuadas.
Comienza colocando el ojo de bife en la parrilla caliente y déjalo cocinar sin tocarlo durante los primeros minutos. Esto permitirá que se forme una costra caramelizada en la superficie de la carne y evitará que se pegue a la parrilla.
Después de unos minutos, utiliza unas pinzas para voltear la carne y cocinarla del otro lado. Evita utilizar tenedores o cuchillos afilados, ya que podrían perforar la carne y hacer que pierda sus jugos.
Continúa volteando la carne cada pocos minutos para asegurarte de que se cocine de manera uniforme. Si deseas obtener marcas de parrilla cruzadas en la superficie de la carne, gira el ojo de bife 90 grados después de unos minutos en cada lado.
Consejos para obtener la jugosidad perfecta
Para obtener un ojo de bife jugoso y lleno de sabor, aquí tienes algunos consejos adicionales:
- Deja que la carne repose: después de cocinar el ojo de bife a la parrilla, es importante dejarlo reposar durante unos minutos antes de cortarlo. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan y se mantengan en la carne, en lugar de escaparse cuando se corta. Envuelve la carne en papel de aluminio y déjala reposar durante al menos 5-10 minutos antes de cortarla.
- Corta en el sentido contrario a las fibras: para obtener una textura más tierna, es importante cortar el ojo de bife en rodajas finas y en el sentido contrario a las fibras de la carne. Esto ayudará a romper las fibras musculares y hacer que la carne sea más fácil de masticar.
- Sirve con una salsa o chimichurri: para realzar aún más el sabor del ojo de bife, puedes acompañarlo con una salsa o chimichurri casero. El chimichurri es una salsa tradicional argentina hecha con perejil, ajo, vinagre, aceite de oliva y especias. Su frescura y acidez contrastan perfectamente con la jugosidad de la carne.
Variantes y presentaciones creativas
Receta de ojo de bife a la provenzal
Una variante del ojo de bife a la parrilla es prepararlo a la provenzal, una receta que combina el sabor de la carne con hierbas y especias mediterráneas.
Para hacer el ojo de bife a la provenzal, mezcla en un recipiente aceite de oliva, ajo picado, perejil, tomillo, romero, sal y pimienta. Unta la mezcla sobre el ojo de bife y déjalo marinar durante al menos 2 horas antes de cocinarlo a la parrilla siguiendo los mismos pasos que se describieron anteriormente.
Enrollado de ojo de bife relleno
Otra forma creativa de preparar el ojo de bife es hacer un enrollado relleno. Para ello, abre el ojo de bife en forma de libro y rellénalo con ingredientes de tu elección, como queso, espinacas, jamón o champiñones. Luego, enrolla la carne y átala con hilo de cocina para mantenerla unida. Cocina el enrollado a la parrilla, volteándolo regularmente hasta que esté bien cocido.
Brochetas de ojo de bife y verduras
Si buscas una opción más ligera y saludable, puedes cortar el ojo de bife en cubos y ensartarlos en brochetas junto con trozos de verduras como pimientos, cebollas y tomates. Cocina las brochetas a la parrilla hasta que la carne esté en su punto de cocción deseado y las verduras estén tiernas y ligeramente doradas.
Ojo de bife con salsa de chimichurri
Como mencionamos anteriormente, el chimichurri es una salsa clásica argentina que combina perfectamente con el ojo de bife. Puedes preparar una deliciosa salsa de chimichurri mezclando en un recipiente perejil picado, ajo picado, vinagre de vino tinto, aceite de oliva, sal, pimienta y ají molido. Sirve el ojo de bife a la parrilla con una generosa cucharada de salsa de chimichurri por encima.
Acompañamientos ideales para el ojo de bife
Ensaladas frescas y crujientes
Una ensalada fresca y crujiente es el acompañamiento perfecto para el ojo de bife a la parrilla. Puedes preparar una ensalada de rúcula con